Jennifer Roch

Objeto que ves, objeto que puedes recrear en ganchillo. Una técnica tan antigua y encasillada exclusivamente a las abuelas con sus tapetes, renace hoy adquiriendo un nuevo valor artístico a manos de jovenes diseñadores. Además de poder convertirse en hobbie, su práctica resulta adictiva y obsesiva a medida que se aprende, pero nada perjudicial. Asi pues, empieza a no ser extraño ver a chic@ sumergido en la atmósfera de la creatividad que le permite su nueva amiga aguja, mientras va en tren, espera su turno en cualquier cola o simplemente mientras toma una caña con sus colegas. Y es que toda esta fiebre, de procedencia nipona, se contagia de una manera dulce y mágica. Estate bien atento a la última novedad en ganchillo llamado amirugami ¿amiru que? a-m-i-r-u-g-a-m-i. Tan simple como reproducir animales, pasteles, frutas, objetos etc. mediante ganchillo.La única condición que se requiere es tener mucha creatividad y ganas de darle a la aguja.
Así que ya sabes, una buena oportunidad para compartir aficiones con tu abuela.
Se puede conseguir todo y mas de material en la genial tienda-galería Duduá situada en la calle Rossic nº6 en pleno barrio del Borne en Barcelona.
Se sea amante o no del ganchillo es una visita obligada, ya que vale la pena ver el fantástico trabajo de jóvenes diseñadores amantes de las manualidades.